La mejor manera de prevenir la hepatitis A es poniéndose la vacuna contra esta enfermedad. Los bebés que están infectados por el virus de la hepatitis A pueden no presentar ningún síntoma y pasar el virus a los adultos no vacunados, quienes se pueden enfermar gravemente.
¿Qué es la hepatitis A y cómo se propaga?
La hepatitis A* es una infección del hígado altamente contagiosa causada por el virus de la hepatitis A. Cuando los síntomas son notorios, la gravedad de la enfermedad puede variar desde leve —que dura pocas semanas— hasta grave —que dura varios meses. Aunque no sea común, la hepatitis A puede incluso causar la muerte en algunas personas. El virus de la hepatitis A se encuentra en las heces (caca) de las personas que tienen el virus. Se puede propagar cuando:
- Las personas infectadas no se lavan bien las manos después de ir al baño, y luego tocan objetos o alimentos.
- Los cuidadores no se lavan adecuadamente las manos después de cambiar el pañal o limpiar las heces de una persona infectada.
Los bebés infectados con el virus de la hepatitis A se lo pueden transmitir a los cuidadores que entren en contacto son sus heces (caca).
Los bebés y la hepatitis A
Los bebés pueden contraer la hepatitis A al comer alimentos contaminados o ponerse las manos u objetos contaminados en la boca. La hepatitis A se propaga fácilmente, incluso cuando las personas usan buenas prácticas de lavado de manos. Los bebés pueden transmitir la infección a las personas que los cuidan y que entran en contacto con el virus a través de los pañales o las heces. Por esa razón la vacuna contra la hepatitis A (hepA) ¡provee la mejor protección para todos!
¿Por qué le debería poner la vacuna contra la hepatitis A a su bebé?
Las tasas de infección por hepatitis A se han reducido más del 95 % desde que apareció la vacuna en 1995.
La vacuna contra la hepatitis A:
- Protege a su hijo contra esta enfermedad que es potencialmente grave.
- Protege a otras personas contra la enfermedad. La razón es que los niños menores de 6 años generalmente no presentan síntomas cuando tienen hepatitis A, pero pueden transmitir el virus a otras personas.
- Evita que su hijo falte a la escuela o guardería infantil (y que usted falte al trabajo para cuidar de su hijo enfermo).
¿Cuándo se le debe poner la vacuna contra la hepatitis A a su bebé?
Los bebés necesitan 2 dosis de la vacuna contra la hepatitis A para que les dé una protección duradera contra la infección. Su bebé debe recibir:
- La primera dosis entre los 12 y 23 meses de edad.
- La segunda dosis 6 meses después de la primera.
Los adultos se pueden poner la vacuna si no se la pusieron todavía y quieren estar protegidos. De hecho, se están produciendo brotes de hepatitis A en todos los Estados Unidos por personas que nunca se vacunaron. Los CDC recomiendan la vacunación contra la hepatitis A en ciertos grupos, que incluyen:
- Las personas que viajan a países donde la hepatitis A es común.
- La familia y los cuidadores de niños adoptados de países donde la hepatitis A es común.
- Los hombres que tienen contacto sexual con otros hombres.
- Las personas con enfermedades hepáticas de largo plazo, incluidas la hepatitis B y la hepatitis C.
- Las personas con trastornos del factor de la coagulación.
- Las personas que usan drogas, sean inyectables o no.
- Las personas sin hogar.
Síntomas de hepatitis A
No todos presentan síntomas, pero cuando sí los presentan, suelen aparecer entre 2 y 6 semanas después de la infección. Pueden incluir:
- Fiebre
- Cansancio
- Pérdida del apetito (no tener ganas de comer)
- Dolor de estómago
- Náuseas
- Ictericia (coloración amarillenta en la piel y los ojos)
Los bebés y los niños menores de 6 años que contraen el virus, a menudo no presentan síntomas; por lo tanto, puede ser difícil darse cuenta si su bebé tiene hepatitis A. Los bebés, aunque no muestren síntomas, pueden pasar la enfermedad a otras personas, incluso a sus padres o sus cuidadores si estos no están vacunados. Cuando los niños más grandes o los adultos contraen la enfermedad de un niño no vacunado, pueden ponerse muy enfermos. Sus síntomas pueden durar hasta 6 meses, y podrían necesitar atención médica en un hospital.
La vacuna contra la hepatitis A es segura
La vacuna contra la hepatitis A es muy segura y es eficaz para prevenir la infección por este virus. Al igual que cualquier medicamento, las vacunas pueden causar efectos secundarios. Es extremadamente raro que la vacuna contra la hepatitis A cause efectos secundarios graves. Los efectos secundarios que ocurren con mayor frecuencia generalmente son leves y duran 1 o 2 días. Incluyen:
- Dolor en el brazo por la inyección
- Dolor de cabeza
- Cansancio
- Fiebre
- Pérdida del apetito
Para obtener más información sobre la hepatitis A y la vacunación de su hijo, hable con el médico del niño o visite la página web de los CDC sobre la enfermedad de hepatitis A, para padres.
Para obtener información más detallada sobre la hepatitis A y la vacuna para adultos, visite la página de los CDC sobre la hepatitis A (viral)*.
* Los enlaces a sitios web pueden llevar a páginas en inglés o español.